Palabra de poeta: Nedy Varela
Nedy Varela
Contenido de la edición 11.02.2025
Ángel y musa vienen de fuera; el ángel da luces y la musa da formas (Hesíodo aprendió de ellas). Pan de oro o pliegue de túnicas, el poeta recibe normas en su bosquecillo de laureles. En cambio, al duende hay que despertarlo en las últimas habitaciones de la sangre.
Teoría y juego del duende
Federico García Lorca
(Conferencia pronunciada el 20 de octubre de 1933 en la Sociedad de Amigos del Arte, en la ciudad de Buenos Aires).
Hoy presentamos a Nedy Varela, Montevideo, Uruguay, 1951
CON LA PIEL QUE VA QUEDANDO
Hacé lo que te dé la gana
no sigas buscando
ese salitre espeso del recuerdo
los sonidos que no tienen memoria
la sombra en el espejo.
No creas que el infierno
solo espera tu culpa
tus huesos de pecado.
Dejate de complicar con Paraísos
allí te aburren con el arpa
aunque hayas leído en sánscrito la biblia.
Hacé lo que te dé la gana
brindá con la piel que va quedando
mojate la boca de la vida
PESSOA
Desde mi cama, veo el ángulo de la última luz
ante la sombra.
Escucho la voz de Caeiro.
El rebaño retoza en mi mirada.
Cada partícula de mi sueño suma su mínima estructura
a los cometas.
Mi poema teje el vergel anhelado,
suma pétalos.
Jugamos, Caeiro y yo, a saborear las cosas más sencillas.
Me sumo descalza a su sueño.
Llevo mi rebaño junto al suyo.
suspendida
en el haz de luz
que corre entre las hojas.
Brillo en el sol reflejado
ala rota de una libélula
iluminada.
Mi rebaño soy todas y soy una.
Abro los ojos en todas mis ventanas.
FRAGMENTO
Busco
un verso hundido
en un vértigo de naves
y naufragios
Cabalgo océanos
buceando
húmedos augurios
Hallo en el fondo
otros ojos
llenos de insomnio.
Busco
la espesura de un beso
y un hilo de sangre entre sus bordes
Solo rescato
gotas
de silencio.
RÍE CONMIGO
Un escándalo de brisa
alborotó mi pelo.
Dejé partir a las mujeres que hay en mí,
me quedo conmigo,
con la que reconozco volviendo a la caricia.
Tras cada paso torpe y cada acierto
siento en mi risa
cómo queda todo muy lejos de las lágrimas.
Cómo crecen los sueños
tras los muros,
cómo atraviesan bosques y desiertos.
Cómo mi libertad
llena los ojos
y desborda las manos
de todas las que miran al futuro
Tú no olvides reír,
ríe conmigo.
ARS POÉTICA
Música ocupando un lugar que nunca encuentro
Búsqueda incansable
en el hilo intangible del pensamiento.
Una luz va y viene
juega
como linterna desesperada
en un bosque de ciegos.
Los nombres se muestran
envuelven las cosas , las sofocan
Habría que silenciar el nombre de las cosas
ocultar su rastro húmedo en el río
descubrir el alba y su armonía
Hay que dejar la música florecer
debajo de la flor
Dejarla asomar a la sombra del nombre.
Verla crecer
al otro lado de la palabra
donde la música es un todo
con la sonoridad
de la cara oculta de la luna.
Quiero los sonidos
de un signo de puntuación sobre mi reja
La vida por escrito
en la luz de un pentagrama
Descorchar una letra y el sonido del brindis
con tu risa
Los puntos suspensivos
templando chico, repique y piano en una esquina
Abrir una mañana en clave de interrogación
con sol a pleno
Quiero la música
Huella profundamente veloz
en la lentitud de la nostalgia
Quiero la música
Buscarla en el lugar que nunca encuentro
Quiero ese bálsamo fragante
esa brisa de trinos
que acuna la vida.
GUERNICA
La muerte sepultó semillas en los huesos.
Cada cuerpo tendrá una medida exacta
bajo tierra. La tierra será la misma bajo las letanías.
Las aves
desplumaron sus vuelos.
El viento trae sangre entre sus dientes.
El cielo oculta filos en las nubes.
Tú estás allí
abriendo pétalos
perfumando la luz en la negrura
Te abres paso.
Aunque el fuego gima
entre un toro partido y un niño muerto,
la tormenta del hombre duerme en esta guerra
Tú estás allí,
abriendo pétalos
perfumando la luz de la memoria